¿Puede un dolor de muelas desaparecer por sí solo?
Un dolor de muelas genera un dolor muy particular y molesto. Puede ser un dolor persistente o agudo, y las causas del dolor de muelas pueden ser muy variadas. Desde un trozo de comida pegado a la encía, hasta un diente roto, pasando por una infección: todas estas cosas pueden provocar dolor de muelas. La mayoría de las veces, la causa del dolor de muelas requerirá una visita al dentista. Aunque puede parecer que el dolor de muelas desaparece por sí solo, el hecho de que el dolor haya desaparecido no significa que el problema haya desaparecido por sí solo. Ignorar el dolor de muelas puede tener consecuencias graves y duraderas, por lo que consultar a un profesional dental sobre su dolor de muelas es importante para su salud a corto y largo plazo. Para algunas personas, los síntomas del dolor de muelas son leves. Para otros, el dolor puede ser agudo, constante o punzante. A menudo, el dolor sólo se siente cuando se aplica presión sobre un diente, como al morder algo. Otros síntomas de dolor de muelas incluyen hinchazón alrededor del diente, fiebre o dolor de cabeza, drenaje de un diente con mal sabor y mal aliento causado por un diente infectado. Si tiene problemas para respirar o tragar, llame a un médico de inmediato.
Posibles causas del dolor de muelas
Como Como mencionamos anteriormente, puede haber muchas causas de dolor de muelas y la gravedad de estas causas también es variada. Para asegurarse de no sufrir un simple grano de palomita de maíz atascado en las encías, asegúrese de usar hilo dental a diario y de cepillarse los dientes dos veces al día para eliminar los restos de comida. Si estás seguro de que tu dolor de muelas no proviene de la comida, probablemente sea el momento de acudir al dentista para ver si padeces alguno de los siguientes síntomas:
- Un empaste dañado
- Encías infectadas
- Rechinar o apretar los dientes
- Fractura de diente< /li>
- Diente con absceso
- Caries
- Erupción o extracción de un diente
Cómo aliviar el dolor en casa
Si estás esperando ver a un dentista y solo necesitas obtener un poco de alivio, Existen algunos remedios caseros que podrían ayudar a aliviar el dolor de muelas. Estos son sólo temporales y no solucionarán ningún problema subyacente.
- Enjuague con agua salada: El agua salada puede actuar como una solución antibacteriana y antiinflamatoria. La solución también ayuda a eliminar la placa y los residuos de los dientes. Para hacer un enjuague con agua salada, agregue de ½ a ¾ de cucharadita de sal en un vaso de agua tibia. Agite la solución en su boca por hasta 30 segundos. Escupe la solución.
- Enjuague con peróxido de hidrógeno: de manera similar a un enjuague con agua salada, el peróxido de hidrógeno puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor. Simplemente diluya el peróxido de hidrógeno con partes iguales de agua, haga buches en la boca y enjuáguelo bien. ¡No trague esta solución!
- Compresa fría: Haga una compresa fría con hielo o una toalla congelada y manténgala en el área dolorida durante 15 minutos. a la vez. Repita cada pocas horas según sea necesario.
- Medicamentos para el dolor de venta libre: se pueden tomar aspirina, ibuprofeno y paracetamol, como Tylenol. para reducir el dolor y la inflamación. No dar aspirina a niños menores de 16 años.
Ir al dentista por un dolor de muelas
Incluso Aunque el dolor puede aparecer y desaparecer, e incluso ser tolerable, lo mejor es acudir al dentista para confirmar la causa del dolor de muelas. Cuando vaya al dentista, asegúrese de saber y poder comunicar dónde se encuentra el dolor, cuánto tiempo ha estado sucediendo y si algún tratamiento alivia o empeora el dolor. Consulte a su dentista lo antes posible si experimenta cualquiera de los siguientes síntomas:
- Hinchazón de la boca o la cara
- Fiebre, dolor de oído o dolor al abrir bien la boca
- Dolor de muelas intenso
- Un dolor de muelas que ha durado más de dos días
Los dolores de muelas no ponen en peligro la vida, pero debido a que la infección es una de las razones del dolor de muelas, una infección no tratada podría propagarse o empeorar, causando un empeoramiento adicional de la enfermedad. El diagnóstico adecuado es fundamental para evitar la propagación de la infección a otras partes del cuerpo. Y, si bien el dolor de muelas es molesto e incómodo, no tiene por qué durar para siempre. Su dentista puede ayudarle a diagnosticar y tratar cualquier dolencia que le cause dolor y podrá volver a una vida sin dolor.